ANECDOTARIO

Juli Blanco ♥ 

En sala de cinco hicimos una dormida en la escuela para preparar nuestros próximos campamentos. Al llegar a la escuela, me dí cuenta que no tenía el pijama y me puse a llorar desconsoladamente. Mi mamá tuvo que volver a mi casa a buscarlo y traérmelo, ¡pobre!. Jajaja.

Juli  Viglietti

En el campamento de Segundo estaba en el cuarto con Iaru, Bren, Katu y Juli P. Iaru siempre salía cuando las demás nos cambiábamos. Un día abrió la puerta, se metió y a los tres segundos salió diciendo "Uy, el ropero". Sí, había entrado en el armario.

Marto Laski

Yo entré a la escuela en Primer Grado, así que mi primera experiencia campamentil fué en ese grado.

Al llegar la noche Julián se acostó en la cama y empezó a quejarse de que le picaba la espalda y de que la sábana era muy rasposa. Al poco tiempo se dió cuenta de que no estaba sobre la sábana, sino que se había metido en el colchón. Jajaja

Katu Fumberg

Cuando estábamos en Jardín, Valen entró a la sala con el desayuno, una tostada con manteca y una leche chocolatada.

Empezó a desayunar en la salita y después de preguntar por qué había llevado el desayuno allí, contestó que su mamá se había levantado tarde, con lo cual ella también lo había hecho y se había quedado sin tiempo para poder desayunar.  ¡JUA!

Valen Melieni

Cuando  estábamos en preescolar, tuvimos la dormida de la escuela e hicimos un desfile de pijamas, cuando era mi turno me dio mucha vergüenza y en vez de pasar caminando, pasé gateando porque no quería que me vieran la cara JAJA

I Gon

Una vez cuando tenía 3 años, vino Barbi a jugar a mi casa. Estábamos en la compu y de pronto llegó mi hermano y Bar dijo ¡¡¡UUUUHHYYYY UN LADRON !!!.

Caro

Me acuerdo de la dormida de Salita de cinco...

Cuando yo llegué todos estaban jugando en el patio. Por supuesto, me fuí rápido para donde todos estaban. En el camino, me cruzo con Katu, y noto que en su buzo estaba la misma estampa que estaba en la remera que yo tenía puesta.

Más tarde, en el desfile de pijamas noté que Cande y Pau tenían exactamente el mismo pijama que yo había llevado para el desfile, era mi pijama preferido.

Qué poca originalidad, ¿no?

Luli Ant

Cuando era chiquitita, Segundo grado, me encantaba en los recreos agarrar las hormigas y ver cuanto tiempo duraban sin que se me caigan.Un día con Iaru jugamos a cuantas hormigas le podíamos poner a un peluche que había traído pero después no se las podíamos sacar.

Bren Borys

Cuando estábamos en Cuarto grado, nos fuimos de campamento a San Antonio de Areco en carpa. Todas las carpas eran de a 4 y como la nuestra era de a 5 , Palo, como era la más chiquita, tuvo que dormir transversal en una punta. Nuestra carpa era MUY desordenada, entonces cada vez que nos cambiábamos de ropa, la tirábamos en los pies de Palo, que le sobraba lugar. Una de las últimas noches, la ropa que tirábamos en el rincón, fue creciendo y elevando su tamaño hasta que se formó una GRAN montaña.

 Esa noche, ¡¡¡a Palo se le cayó todo encima!!!.

Lo peor fue el último día, cuando tuvimos que ordenar la carpa...

 

Todavía no nos acordamos cuantas cosas perdimos en ese campamento, pero fué de los mejores y nunca lo voy a olvidar.

Guido 

Resulta que una vez Gon había traído unos caramelos de afuera del país y los trajo a la escuela para poder compartirlos. Realizó un cuestionario de preguntas sobre deportes con temas de ese momento y el que ganaba se quedaba con un caramelo. Gon viene y me empieza a hacer preguntas y yo no sabía nada. En todas las preguntas yo contestaba "no sé" apenas  terminaba de preguntarme. Yo ya me daba por perdido, me enteré después que había salido tercero ¡por  ser uno de los más veloces en responder!. Jajajaja.  

Iaru Pintos

Estaba en el campa de Sexto y era de noche. Juli V. y yo tuvimos que ir a limpiar algo a la cabaña de meriendas y no sabíamos muy bien dónde era. Fuimos con mucho miedo porque el viento movía los árboles y hacía ruidos raros. Cuando llegamos, teníamos la sensación de que alguien nos espiaba. Después de limpiar nos fuimos corriendo porque escuchábamos pisadas. Yo no podía correr más pero Juli me decía que siguiera. Al final volvimos y algunos ya nos estaban buscando.